Esta Semana Santa, decidimos hacer una ruta por las ciudades más emblemáticas de Andalucia.
El primer día era de ruta. Salimos a primera hora de la mañana para intentar evitar las colas hacia las playas. Lo conseguimos con las personas que bajaban de Barcelona, yendo por el interior, pero cuando llegamos a Valls para coger la autopista, todo parado por los maños que bajaban a Salou.
Al cabo de un buen rato, no recuerdo el tiempo exacto, pero fue bastante, cogimos la autopista y directos a Granada, nuestra primera parada.
Llegamos a primera hora de la noche. Fue un viaje pesado por culpa de las colas, el tránsito y sobre todo por la lluvia que nos acompañó durante todo el trayecto.
Tocaba buscar el hotel, nos costó encontrarlo ya que todavía no teníamos navegador. Por fín lo vimos, está en la zona peatonal y aún tuvimos suerte porque habían anulado la procesión por culpa de la lluvia.
Dejamos la maletas y directos a cenar, como era muy tarde, más de las 12h, entramos en un Burger King pero nos dijeron que la cocina estaba cerrada. Fue lo mejor que nos podía haber pasado!!!
Salimos un poco mosqueados y enseguida encontramos un bar. Entramos y no nos pusieron ningún problema para cenar. Tomamos unos cuantas tapas, todas buenísimas y el jamón excelente. Lo más curioso fue ver como apuntaban las que nos tomábamos, en la misma barra con tiza.
Con la barriga llena y el ánimo renovado, nos fuimos al hotel que mañana tocaba madrugar.
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